Claridad, monocromía, sencillez, «menos es más»: estos son algunos de los términos y conceptos que vienen inmediatamente a la mente cuando se piensa en el minimalismo. El diseño de interiores minimalista es muy similar al diseño de interiores moderno y consiste en utilizar lo esencial para crear un espacio sencillo y despejado. Suele combinar un espacio abierto, con mucha luz y muebles funcionales, y se centra en la forma, el color y la textura de unos pocos elementos básicos. Conseguir este aspecto es más sofisticado y, francamente, más difícil que limitarse a seleccionar unos pocos muebles sobre un fondo blanco, lo que puede dejar un espacio con una sensación fría y deshabitada. Hay belleza en la sencillez, pero como en cualquier estilo de interiorismo, también se requiere cierta habilidad. Por eso hemos escrito algunos principios rectores sobre cómo conseguir un diseño minimalista adecuado.
1. Limita tu paleta de colores
Si quieres cambiar tu espacio y darle un estilo minimalista, empieza por pintar las paredes. El minimalismo se aplica a todo, incluidos los colores. Los interiores totalmente blancos son muy populares entre los minimalistas. Los grises y los tonos tierra también sirven. En resumen, los colores neutros son perfectos para un diseño minimalista. Puedes romper la monotonía de los neutros añadiendo toques de monocromos pastel o colores primarios sólidos; un cojín aquí o un jarrón allá. Ten cuidado de no exagerar ni estropear el efecto.
2. Utiliza formas geométricas sencillas
El minimalismo se basa en líneas rectas, curvas suaves, formas sencillas y planos planos. Así que aléjate de los muebles complicados con detalles grabados o intrincados. Puede que sean bonitos, pero no son para tí. Mantenlos planos, lisos y limpios.
3. Rompe con el aburrimiento y utiliza texturas
Si te has estado preguntando cómo hacer que tu espacio blanco o gris sea más impresionante, aquí tienes la respuesta: ¡la textura! Introducir diferentes texturas en tu interior manteniendo el mismo color te dará variedad. Animará tu espacio de forma minimalista. Pero, de nuevo, ¡no exageres! Esa es la esencia del minimalismo.
4. Utiliza un punto focal en tu espacio
Los centros de mesa, las obras de arte o incluso los muebles pueden desempeñar el papel de punto focal en tu espacio. Un centro de mesa puede ser un jarrón icónico sobre una mesa central o un cuadro. Los cuadros relativamente grandes con colores vibrantes que contrasten con el ambiente neutro general atraerán la atención de forma natural. Sin embargo, si tu interior ya contiene toques de color, quizá quieras combinarlos con la paleta del cuadro.
5. Prioriza la calidad sobre la cantidad
El minimalismo requiere poca decoración, ornamentación y detalles extravagantes. Entonces, ¿de qué otra forma puedes conseguir que tu interior sea elegante? Invierte en materiales valiosos como el mármol o la porcelana de calidad. No hace falta que alicates todas las paredes con mármol. Solo una pared o tabique, y podría ser tu punto focal.
6. Presta atención al orden
El minimalismo se basa en el orden, la limpieza y los colores neutros, que son el contexto perfecto para resaltar el más mínimo desorden. En consecuencia, hay que limpiar con regularidad y hacer sitio para todo. Intenta limitar las cosas sobre la mesa o los armarios. Los armarios, alacenas y estanterías están en el interior por una razón práctica.
7. Atención al detalle
El minimalismo no es un estilo orientado a los detalles. Sin embargo, al igual que las superficies y los colores limpios acentúan el desorden, también acentúan los detalles equivocados. Los detalles deficientes pueden ser evidentes en cosas pequeñas, como la conexión de una unidad de iluminación al techo, unas bisagras de puerta en mal estado o un alicatado defectuoso.
8. Elige bien los adornos
Puedes utilizar adornos en el interior, pero ten cuidado de no pasarte. ¿Qué adornos puedes introducir en tu interior minimalista? Unas plantas de interior en macetas del mismo tamaño o en macetas de distintos tamaños pero de la misma forma y color quedarían perfectas. Un cuadro en la pared es una buena idea y un cuadro grande es mucho mejor que varios pequeños.
9. Cuidado con los estampados
¿Te gustan los estampados? Las reglas del color y la forma también se aplican a los estampados. Apuesta por estampados sencillos y geométricos con colores neutros o monocromos. Cuanto menos detalle y color, más apropiado puede ser el estampado.
10. Deja que entre la luz natural
La luz natural complementará las superficies blancas y brillantes, haciendo que el espacio resulte cómodo y espacioso. También muestra los verdaderos colores de las paredes, suelos y muebles. Por último, preserva la verdadera esencia del estilo minimalista.
Si deseas cambiar tu espacio con un estilo minimalista, el primer paso podría ser pintar las paredes. Dicho esto, lo mejor es utilizar colores neutros para las paredes. Prueba nuestra calculadora online para saber cuánto te costaría inmediatamente.
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